El marxismo, como el freudianismo ortodoxo, como el catolicismo, es un sistema cerrado. El sistema cerrado excluye la posibilidad de la argumentacion objetiva, mediante dos procedimientos relacionados entre si: a) de acuerdo con las reglas escolasticas, se quita todo valor probatorio a los hechos; b) se invalidan las objeciones desplazando la discusion al motivo psicologico que provoca la objecion.