Hay una gran diferencia entre llevar el mundo en si mismo y saberlo. Un loco puede tener ideas que recuerden a Platon, y un pequeno y devoto colegial del Instituto de Herrnhut puede recrear las profundas conexiones mitologicas que aparecen en los gnosticos o en Zoroastro. !Pero el no lo sabe! Mientras no lo sepa es como un arbol o una piedra; en el mejor de los casos, como un animal. En el momento en que tenga la primera chispa de conciencia, se convertira en un hombre. ?No ira usted a creer que todos esos bipedos que andan por la calle son hombres solo porque anden derechos y lleven a sus crias nueve meses dentro de si? Muchos de ellos son peces u ovejas, gusanos o angeles; otros son hormigas, y otros abejas. En cada uno existen las posibilidades de ser hombre; pero solo cuando las vislumbra, cuando aprende a hacerlas conscientes, por lo menos en parte, estas posibilidades le pertenecen.