El apostol Pablo expuso las obvias e irrefutables consecuencias de un cristianismo sin resurreccion. Si Cristo no resucito, argumentaba el, nos quedamos con la siguiente lista de conclusiones (1 Corintios 15:13-19): Nuestra predicacion es en vano. Nuestra fe es ilusoria. Somos testigos falsos de Dios. Continuamos en nuestros pecados. Nuestros seres queridos que han muerto estan perdidos. Somos los mas desdichados de todos los hombres. Estas seis consecuencias revelan claramente la conexion interna de la resurreccion con la esencia del cristianismo. La resurreccion de Jesus es el sine qua non de la fe cristiana. Eliminemos la resurreccion y eliminaremos el cristianismo.