Creo que hay que resistir: este ha sido mi lema. Pero hoy, cuantas veces me he preguntado como encarnar esta palabra, como vivir la resistencia. Antes cuando la vida era menos dura, yo hubiera entendido por resistir un acto heroico, como negarse a seguir embarcado en este tren que nos impulsa a la locura y al infortunio. ?Se les puede pedir a la gente del vertigo que se revele? ?Puede pedirse a los hombres y a las mujeres de mi pais que se nieguen a pertenecer a este capitalismo salvaje si tienen que mantener a sus hijos, a sus padres? Si son responsables, ?Como habrian de abandonar esa vida?