Ya saben ustedes lo que ocurre cuando dos personas estan charlando. Uno habla y el otro le interrumpe. Eso es lo mismo que me pasa a mi, yo... y comienza a hablar de si mismo hasta que el otro no logre de nuevo decir: eso es lo mismo que me pasa a mi, yo... La frase eso es lo mismo que me pasa a mi, yo... parece como si continuase los pensamientos del otro, como si enlazase con ellos dandoles la razon, pero eso es falso: en realidad se trata de una rebelion brutal contra una brutal violencia, de un intento de liberar de la esclavitud la propia oreja y ocupar por la fuerza la oreja del contrario. Porque toda la vida del hombre entre la gente no es mas que una lucha por la oreja ajena.