La Patria! ?La patria de quien? Habian llegado por millones de las cuevas de Espana, de las miserables aldeas de Italia, de los Pirineos. Parias de todos los confines del mundo, hacinados en las bodegas pero sonando: alla les espera la libertad, ahora no seran mas bestias de carga. America! El pais mitico donde el dinero se encontraba tirado por las calles. Y luego el trabajo duro, los salarios miserables, las jornadas de doce y catorce horas. Esa habia sido finalmente la verdadera America para la inmensa mayoria: miseria y lagrimas, humillacion y dolor, anoranza y nostalgia. Como ninos enganados con cuentos de hadas y llevados a la esclavitud. Y entonces ellos, o sus hijos, dirigian sus miradas a otra utopias, a tierras futuras de las que hablaban libros violentos y a la vez llenos de ternura por ellos, por los miserables; libros que les hablaban de tierra y libertad, y los empujaban a la revuelta.