Los ingenieros del agua dejaron el calentador de la piscina en marcha demasiado tiempo y, por la noche, los vapores de cloro se elevaron por encima de la vida vegetal del planeta, y yo imagine mi carne en el interior de la piscina, calida, protegida, sintiendo la gravedad, pero capaz al mismo tiempo de burlarla flotando. ?Flotarias conmigo ahora, si te lo pidiera, saltarias a la piscina, sin desnudarte siquiera? ?Podria desnudarte dentro, quitarte la ropa y hundirnos juntos en el agua?