En efecto, fue un macho beta sumamente habilidoso quien descubrio el fuego, aunque, como era de esperar, un macho alfa se lo arrebatara casi enseguida (los alfa fracasaron en el descubrimiento del fuego, pero, como no entendian que no habia que agarrar el palo por el lado caliente y anaranjado, se les atribuye en cambio la invencion de la quemadura de tercer grado).