Site uses cookies to provide basic functionality.

OK
En ese momento, por fin lo capto. En lo mas profundo de si mismo,Tsukuru Tazaki lo comprendio: los corazones humanos no se unen solo mediante la armonia. Se unen, mas bien, herida con herida. Dolor con dolor. Fragilidad con fragilidad. No existe silencio sin un grito desgarrador, no existe perdon sin que se derrame sangre, no existe aceptacion sin pasar por un intenso sentimiento de perdida. Esos son los cimientos de la verdadera armonia.