"El problema no era su trabajo, que me parecia magnifico, sino su gusto musical. (...) Del walkman salia a todo volumen una musica horrenda de cualquiera de esos grupos que los veinteaneros suelen escuchar. Mientras que pudiera probarse cientificamente que su musica era inferior a lo que escuchabamos los de mi generacion, todo estaba bien (...) Sonic Youth durante horas, y, de repente, el Beethoven tardio. Despues, Grand Ole Opry, catos gregrorianos, Shostakovich, John Coltrane. (...) Estaba dedicandose a gastarse los primeros cheques de su vida en una exploracion metodica de nuevos tipos de musica, escuchandolos con atencion, formandose distintas opiniones sobre ellos, odiando algunos y disfrutando de todo el proceso. Era asi en todos los demas aspectos de su vida. Tenia barba y pelo medio largo, y un dia sin ningun miramiento, se lo afeito todo y aparecio calvo: "Pense que seria interesante probar este aspecto algun tiempo, ver si la forma en la que la gente interactua conmigo cambia". Era irritante lo abierto que estaba a todo y lo dispuesto a probar cualquier novedad; ademas, era deprimente porque me hacia darme cuenta de mi propia cerrazon mental."