A veces, a los politicos les gusta pensar como economistas y utilizan incentivos economicos para fomentar la buena conducta. En los ultimos anos, muchos gobiernos han empezado a basar sus impuestos de recogida de basura en el volumen. Si la gente tiene que pagar por cada bolsa de basura de mas, razonan, tendran un fuerte incentivo para producir menos. Pero esta nueva manera de gravar tambien da a la gente un incentivo para llenar aun mas sus bolsas (una tactica que los responsables de la basura de todo el mundo llaman ahora <>) o para tirar su basura en los bosques (que es lo que ocurrio en Charlottesville, Virginia). En Alemania, los evasores del impuesto de basuras tiraban tantos restos de comida por el retrete que las alcantarillas se infestaron de ratas. En Irlanda, un nuevo impuesto de recogida de basuras genero un aumento de la quema de basuras en los patios traseros, que no solo era mala para el medio ambiente, sino tambien para la salud publica: en el Hospital de St. James de Dublin casi se triplicaron los casos de pacientes que se habian prendido fuego mientras quemaban la basura.