La seleccion sexual es, por lo tanto, menos rigurosa que la seleccion natural. Generalmente, los machos mas vigorosos, los que estan mejor adecuados a su situacion en la naturaleza, dejaran mas descendencia; pero en muchos casos la victoria depende no tanto del vigor natural como de la posesion de armas especiales limitadas al sexo masculino. Un ciervo sin cuernos, un gallo sin espolones, habrian de tener pocas probabilidades de dejar numerosa descendencia. La seleccion sexual, dejando siempre criar al vencedor, pudo, seguramente, dar valor indomable, longitud a los espolones, fuerza al ala para empujar la pata armada de espolon, casi del mismo modo que lo hace el brutal gallero mediante la cuidadosa seleccion de sus mejores gallos.