Cuando miraba a mis hijos y a mi esposa, me preguntaba si habiamos estado juntos anteriormente. ?Acaso habiamos elegido compartir las pruebas, las tragedias y las alegrias de esta vida? ?Careciamos de edad? Sentia hacia ellos un gran amor, una gran ternura. Comprendi que sus defectos eran cosas sin importancia. En realidad, no tienen tanta importancia. El amor si.