Site uses cookies to provide basic functionality.

OK
I JOHN
Up
1 2 3 4 5
Chapter 1
I Jo SpaRV186 1:1  Lo que era desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos mirado, y nuestras manos han tocado, del Verbo de vida:
I Jo SpaRV186 1:2  (Porque la vida fue manifestada; y lo vimos, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos ha manifestado:)
I Jo SpaRV186 1:3  Lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos para que también vosotros tengáis comunión con nosotros, y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesu Cristo.
I Jo SpaRV186 1:4  Y estas cosas os escribimos, para que vuestro gozo sea cumplido.
I Jo SpaRV186 1:5  Pues éste es el mensaje que hemos oído de él mismo, y que os anunciamos a vosotros: Que Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él.
I Jo SpaRV186 1:6  Si nosotros dijéremos que tenemos comunión con él, y andamos en tinieblas, mentimos, y no hacemos la verdad.
I Jo SpaRV186 1:7  Mas si andamos en la luz, como él está en la luz, tenemos comunión los unos con los otros, y la sangre de Jesu Cristo su Hijo nos limpia de todo pecado.
I Jo SpaRV186 1:8  Si dijéremos que no tenemos pecado, engañámonos a nosotros mismos, y no hay verdad en nosotros.
I Jo SpaRV186 1:9  Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para que nos perdone nuestros pecados, y nos limpie de toda maldad.
I Jo SpaRV186 1:10  Si dijéremos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra no está en nosotros.
Chapter 2
I Jo SpaRV186 2:1  Hijitos míos, estas cosas os escribo, para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, un abogado tenemos para con el Padre, a Jesu Cristo el Justo:
I Jo SpaRV186 2:2  Y él es la propiciación por nuestros pecados; y no solamente por los nuestros, mas también por los de todo el mundo.
I Jo SpaRV186 2:3  Y por esto sabemos que nosotros le hemos conocido, si guardamos sus mandamientos.
I Jo SpaRV186 2:4  El que dice: Yo le he conocido, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y no hay verdad en él.
I Jo SpaRV186 2:5  Mas el que guarda su palabra, el amor de Dios es verdaderamente perfecto en él: por esto sabemos que estamos en él.
I Jo SpaRV186 2:6  El que dice que está en él, debe andar como él anduvo.
I Jo SpaRV186 2:7  Hermanos, no os escribo un mandamiento nuevo, sino el mandamiento antiguo, que habéis tenido desde el principio: el mandamiento antiguo es la palabra que habéis oído desde el principio.
I Jo SpaRV186 2:8  Otra vez os escribo un mandamiento nuevo, que es la verdad en él, y en vosotros; porque las tinieblas están pasando, y la verdadera luz ya alumbra.
I Jo SpaRV186 2:9  El que dice que está en la luz, y aborrece a su hermano, el tal aun está en tinieblas todavía.
I Jo SpaRV186 2:10  El que ama a su hermano, está en la luz, y no hay escándalo en él.
I Jo SpaRV186 2:11  Empero el que aborrece a su hermano, está en tinieblas, y anda en tinieblas, y no sabe donde se va; porque las tinieblas le han cegado los ojos.
I Jo SpaRV186 2:12  Hijitos, os escribo que vuestros pecados os son perdonados por causa de su nombre.
I Jo SpaRV186 2:13  Padres, os escribo que habéis conocido a aquel que es desde el principio. Mancebos, os escribo que habéis vencido al maligno. Hijitos, os escribo que habéis conocido al Padre.
I Jo SpaRV186 2:14  Padres, os he escrito que habéis conocido al que es desde el principio. Mancebos, yo os escribí que sois fuertes, y que la palabra de Dios mora en vosotros, y que habéis vencido al maligno.
I Jo SpaRV186 2:15  No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.
I Jo SpaRV186 2:16  Porque todo lo que hay en el mundo, que es concupiscencia de la carne, y concupiscencia de los ojos, y soberbia de la vida, no es del Padre, mas es del mundo.
I Jo SpaRV186 2:17  Y el mundo se pasa, y su concupiscencia; mas el que hace la voluntad de Dios, permanece para siempre.
I Jo SpaRV186 2:18  Hijitos, ya es la postrera hora; y como vosotros habéis oído que el anticristo ha de venir, así también al presente han comenzado a ser muchos anticristos, por lo cual sabemos que ya es la postrimera hora.
I Jo SpaRV186 2:19  Ellos salieron de entre nosotros, mas no eran de nosotros; porque si fueran de nosotros, hubieran cierto permanecido con nosotros; empero esto es para que se manifestase que todos no son de nosotros.
I Jo SpaRV186 2:20  Mas vosotros tenéis la unción del Santo, y conocéis todas las cosas.
I Jo SpaRV186 2:21  No os he escrito, como si ignoraseis la verdad, mas como a los que la conocéis, y que ninguna mentira es de la verdad.
I Jo SpaRV186 2:22  ¿Quién es mentiroso, sino el que niega que Jesús es el Cristo? éste es el anticristo, que niega al Padre, y al Hijo.
I Jo SpaRV186 2:23  Cualquiera que niega al Hijo, este tal tampoco tiene al Padre. (Empero) cualquiera que confiesa al Hijo, tiene también al Padre.
I Jo SpaRV186 2:24  Pues lo que habéis oído desde el principio, sea permaneciente en vosotros; porque si lo que habéis oído desde el principio fuere permaneciente en vosotros, también vosotros permaneceréis en el Hijo, y en el Padre.
I Jo SpaRV186 2:25  Y esta es la promesa, la cual él nos prometió, que es vida eterna.
I Jo SpaRV186 2:26  Estas cosas os he escrito tocante a los que os engañan.
I Jo SpaRV186 2:27  Empero la unción que vosotros habéis recibido de él, mora en vosotros; y no tenéis necesidad que ninguno os enseñe; mas como la unción misma os enseña de todas cosas, y es verdadera, y no es mentira, así como os ha enseñado, perseverád en él.
I Jo SpaRV186 2:28  Y ahora, hijitos, perseverád en él; para que cuando apareciere, tengamos confianza, y no seamos confundidos por él en su venida.
I Jo SpaRV186 2:29  Si sabéis que él es justo, sabéd también que cualquiera que hace justicia, es nacido de él.
Chapter 3
I Jo SpaRV186 3:1  Mirád cual amor nos ha dado el Padre, que seamos llamados hijos de Dios: por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoce a él.
I Jo SpaRV186 3:2  Amados míos, ahora somos nosotros los hijos de Dios, y aun no es manifestado lo que hemos de ser: empero sabemos que cuando él apareciere, seremos semejantes a él; porque le veremos como él es.
I Jo SpaRV186 3:3  Y cualquiera que tiene esta esperanza en él se purifica a sí mismo, como él es puro.
I Jo SpaRV186 3:4  Cualquiera que hace pecado, traspasa también la ley; porque el pecado es la transgresión de la ley.
I Jo SpaRV186 3:5  Y sabéis que él apareció para quitar nuestros pecados, y no hay pecado en él.
I Jo SpaRV186 3:6  Cualquiera que permanece en él, no peca: cualquiera que peca, no le ha visto, y no le ha conocido.
I Jo SpaRV186 3:7  Hijitos, ninguno os engañe: el que hace justicia es justo, como él también es justo.
I Jo SpaRV186 3:8  El que hace pecado, es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para que deshaga las obras del diablo.
I Jo SpaRV186 3:9  Cualquiera que es nacido de Dios, no hace pecado; porque su simiente mora en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios.
I Jo SpaRV186 3:10  En esto son manifiestos los hijos de Dios, y los hijos del diablo: cualquiera que no hace justicia, y que no ama a su hermano, no es de Dios.
I Jo SpaRV186 3:11  Porque éste es el mensaje que habéis oído desde el principio, que nos amemos unos a otros:
I Jo SpaRV186 3:12  No como Caín, que era del maligno, y mató a su hermano. ¿Y por qué causa le mató? Porque sus obras eran malas, y las de su hermano eran justas.
I Jo SpaRV186 3:13  Hermanos míos, no os maravilléis si el mundo os aborrece.
I Jo SpaRV186 3:14  Nosotros sabemos que somos pasados de muerte a vida, en que amamos a los hermanos. El que no ama a su hermano, está en muerte.
I Jo SpaRV186 3:15  Cualquiera que aborrece a su hermano, es homicida; y sabéis que ningún homicida tiene vida eterna permaneciente en sí.
I Jo SpaRV186 3:16  En esto hemos conocido el amor de Dios, en que él puso su vida por nosotros, y nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos.
I Jo SpaRV186 3:17  Mas el que tuviere bienes de este mundo, y viere a su hermano tener necesidad, y le cerrare sus entrañas, ¿cómo es posible que permanezca el amor de Dios en él?
I Jo SpaRV186 3:18  Hijitos míos, no amemos de palabra, ni de lengua; sino con obra y de verdad.
I Jo SpaRV186 3:19  Y en esto conocemos que nosotros somos de la verdad, y persuadiremos nuestros corazones delante de él.
I Jo SpaRV186 3:20  Porque si nuestro corazón nos reprende, mayor es Dios que nuestro corazón, y sabe todas las cosas.
I Jo SpaRV186 3:21  Carísimos, si nuestro corazón no nos reprende, confianza tenemos en Dios;
I Jo SpaRV186 3:22  Y cualquiera cosa que pidiéremos, la recibiremos de él; porque guardamos sus mandamientos, y hacemos las cosas que son agradables delante de él.
I Jo SpaRV186 3:23  Y éste es su mandamiento: Que creamos en el nombre de su Hijo Jesu Cristo, y nos amemos unos a otros, como nos lo ha mandado.
I Jo SpaRV186 3:24  Y el que guarda sus mandamientos, mora en él, y él en él. Y en esto sabemos que él mora en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado.
Chapter 4
I Jo SpaRV186 4:1  Amados, no creáis a todo espíritu; sino probád los espíritus si son de Dios. Porque muchos falsos profetas son salidos en el mundo.
I Jo SpaRV186 4:2  En esto se conoce el Espíritu de Dios: Todo espíritu que confiesa que Jesu Cristo es venido en carne, es de Dios;
I Jo SpaRV186 4:3  Y todo espíritu que no confiesa que Jesu Cristo es venido en carne, no es de Dios; y este tal espíritu es espíritu del anticristo, del cual vosotros habéis oído que ha de venir, y que ahora ya está en el mundo.
I Jo SpaRV186 4:4  Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque el que en vosotros está, es mayor que el que está en el mundo.
I Jo SpaRV186 4:5  Ellos son del mundo, por eso hablan del mundo, y el mundo los oye.
I Jo SpaRV186 4:6  Nosotros somos de Dios: el que conoce a Dios, es nuestro escuchador: el que no es de Dios, no nos presta oídos. Por esto conocemos el espíritu de verdad, y el espíritu de error.
I Jo SpaRV186 4:7  Carísimos, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Y cualquiera que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios.
I Jo SpaRV186 4:8  El que no ama, no conoce a Dios; porque Dios es amor.
I Jo SpaRV186 4:9  En esto se mostró el amor de Dios en nosotros, en que Dios envió su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él.
I Jo SpaRV186 4:10  En esto consiste el amor, no que nosotros hayamos amado a Dios, sino que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo para ser propiciación por nuestros pecados.
I Jo SpaRV186 4:11  Amados, si Dios nos ha así amado, debemos también nosotros amarnos los unos a los otros.
I Jo SpaRV186 4:12  Ninguno vio jamás a Dios. Si nos amamos los unos a los otros, Dios está en nosotros, y su amor es perfecto en nosotros.
I Jo SpaRV186 4:13  En esto conocemos que moramos en él, y él en nosotros, en que nos ha dado de su Espíritu.
I Jo SpaRV186 4:14  Y nosotros hemos visto, y testificamos que el Padre ha enviado a su Hijo para ser Salvador del mundo.
I Jo SpaRV186 4:15  Cualquiera que confesare que Jesús es el Hijo de Dios, Dios está en él, y él en Dios.
I Jo SpaRV186 4:16  Y nosotros hemos conocido, y creído el amor que Dios tiene por nosotros. Dios es amor; y el que mora en amor mora en Dios, y Dios en él.
I Jo SpaRV186 4:17  En esto es perfecto el amor con nosotros, para que tengamos confianza en el día del juicio, que cual él es, tales somos nosotros en este mundo.
I Jo SpaRV186 4:18  En el amor no hay temor; mas el perfecto amor echa fuera el temor; porque el temor tiene castigo. De donde el que teme, no es perfecto en el amor.
I Jo SpaRV186 4:19  Nosotros le amamos a él, porque él primero nos amó.
I Jo SpaRV186 4:20  Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Porque el que no ama a su hermano, al cual ha visto, ¿cómo puede amar a Dios, que no ha visto?
I Jo SpaRV186 4:21  Y nosotros tenemos este mandamiento de él: Que el que ama a Dios, ame también a su hermano.
Chapter 5
I Jo SpaRV186 5:1  Todo aquel que cree que Jesús es el Cristo, es nacido de Dios; y cualquiera que ama al que ha engendrado, ama también al que es engendrado de él.
I Jo SpaRV186 5:2  En esto conocemos que amamos a los hijos de Dios, cuando amamos a Dios, y guardamos sus mandamientos.
I Jo SpaRV186 5:3  Porque éste es el amor de Dios, que guardemos sus mandamientos; y sus mandamientos no son graves.
I Jo SpaRV186 5:4  Porque todo aquello que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que vence al mundo, es a saber, nuestra fe.
I Jo SpaRV186 5:5  ¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?
I Jo SpaRV186 5:6  Este es Jesu Cristo, que vino por agua y sangre: no por agua solamente, sino por agua y sangre. Y el Espíritu es el que da testimonio; porque el Espíritu es la verdad.
I Jo SpaRV186 5:7  Porque tres son los que dan testimonio en el cielo, el Padre, el Verbo, y el Espíritu Santo; y estos tres son uno.
I Jo SpaRV186 5:8  También son tres los que dan testimonio en la tierra, el espíritu, y el agua, y la sangre; y estos tres son uno.
I Jo SpaRV186 5:9  Si recibimos el testimonio de los hombres, el testimonio de Dios es mayor; porque éste es el testimonio de Dios, que ha testificado de su Hijo.
I Jo SpaRV186 5:10  El que cree en el Hijo de Dios, tiene el testimonio en sí mismo. El que no cree a Dios, ha hecho mentiroso a Dios; porque no ha creído en el testimonio que Dios ha testificado de su Hijo.
I Jo SpaRV186 5:11  Y éste es el testimonio, es a saber, que Dios nos ha dado vida eterna, y que esta vida está en su Hijo.
I Jo SpaRV186 5:12  El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios, no tiene vida.
I Jo SpaRV186 5:13  Yo he escrito estas cosas a vosotros que creeis en el nombre del Hijo de Dios; para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios.
I Jo SpaRV186 5:14  Y esta es la confianza que tenemos en él, que si demandáremos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye.
I Jo SpaRV186 5:15  Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que demandáremos, también sabemos que tenemos las peticiones que le hubiéremos demandado.
I Jo SpaRV186 5:16  Si alguno viere pecar a su hermano pecado que no es de muerte, demandará a Dios, y él le dará vida; digo a los que pecan no de muerte. Hay pecado de muerte: por el cual yo no digo que ruegues.
I Jo SpaRV186 5:17  Toda iniquidad es pecado; empero hay pecado que no es de muerte.
I Jo SpaRV186 5:18  Bien sabemos que cualquiera que es nacido de Dios, no peca; mas el que es engendrado de Dios, se guarda a sí mismo, y el maligno no le toca.
I Jo SpaRV186 5:19  Sabido tenemos que somos de Dios, y todo el mundo está puesto en el maligno.
I Jo SpaRV186 5:20  Empero sabemos que el Hijo de Dios es venido, y nos ha dado entendimiento, para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesu Cristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna.